El Mundo
Publicado el abril 6, 2022 | 10:59 am

Presidente de Chile Gabriel Boric dice Putin está realizando una guerra de agresión inaceptable”

Con sólo 36 años, Gabriel Boric se transformó en la gran novedad política del continente al poner fin a la alternancia en el poder de las dos grandes coaliciones que gobernaron su país durante los últimos 30 años y convertirse en el presidente más joven de la historia de Chile. Su llegada a La Moneda, después de las masivas protestas sociales de 2019 y mientras se elabora una nueva Constitución, fue la última señal de que la dirigencia que sirvió para salir de la dictadura de Pinochet y crecer con estabilidad, descenso de la pobreza y baja inflación -una rareza en la región- ya no era capaz de dar respuestas a desafíos pendientes de larga data y nuevas demandas sociales.

En su país y en América Latina, el ex dirigente estudiantil y estrella naciente de la “nueva izquierda” genera entusiasmo y temores en diversos sectores. Antes de finalizar su primer viaje internacional en Buenos Aires, recibió a Infobae en la embajada chilena para una entrevista.

-Está cerca de cumplir su primer mes como el presidente más joven de la historia de su país, ¿Lo está disfrutando o lo está sufriendo?

-Es un proceso de aprendizaje permanente, de desafíos que no paran. Un presidente de una república amiga me dijo que ser presidente del siglo XXI es estar permanentemente administrando crisis. Y el problema es que si uno se dedica a administrar crisis, pierde el rumbo. Entonces es muy importante, a la vez que uno administra la coyuntura, tener muy claro hacia dónde quiere ir. Y yo he tratado de preocuparme de no ser un opinador de la coyuntura, sino más bien un presidente que esté pensando en cómo enfocar el barco hacia el puerto a donde vamos. Eso no es fácil. Seguramente traerá dificultades en términos de encuestas de opinión y cosas así, pero yo creo que es lo correcto pensar en el largo plazo más que solo en la próxima hora.

-¿Puede dormir bien o solo imaginar el trabajo que tiene por delante lo hace dormir poco?

-No, fíjate que tengo el don de poder quedarme dormido con facilidad a piacere. O sea, cuando quiero dormir, puedo acostarme y descansar. No todo lo que me gustaría, pero no tengo problemas de sueño. De hecho, sueño mucho. Tengo una imaginación muy fértil en esas horas.

-¿Y se acuerda los sueños?

-Me acuerdo los sueños y muchas veces los anotó. Que es una locura eso, porque ver el subconsciente a veces es extraño.

  • ¿La elección de Buenos Aires como su primer destino internacional tuvo más que ver con cumplir una tradición informal entre los presidentes chilenos o con la afición personal que ha demostrado tener por la Argentina, por la cultura argentina, por los libros, por la música, por el fútbol argentino?

-Es una mezcla. Cuando uno llega a la presidencia de la República entra a habitar una institución que es más grande que uno mismo. Entonces uno no puede llegar pretendiendo barrer con todo lo pasado y con ciertas tradiciones que además tienen sentido. Hace mucho tiempo que los presidentes de Chile, y la Presidenta (Michelle) Bachelet también, sus primeras visitas oficiales fueron acá a la hermana República Argentina. Yo quise mantener eso pero además, como he mencionado, tengo un fuerte vínculo con Argentina porque soy de la Patagonia. Allá no tenemos cordillera, entonces el cruce es mucho más fácil. Compartimos Tierra del Fuego y, como tú bien dices, me crié escuchando punk argentino en conjunto con el chileno y un intercambio permanente de bandas, disfrutando del fútbol. Tuve la oportunidad de conocer a algunos de mis referentes futbolísticos que vinieron a saludarnos acá en la embajada, Pipo Gorosito, el Beto Acosta, el Polo Quintero, Charly Vázquez, fue un tremendo honor. Y ahora últimamente, también, claro, cada vez más la literatura.

-Usted lo presenta de una manera muy poética y agradable esto de que en la Patagonia no hay fronteras, pero déjeme decirle que, en contraste con eso, la Patagonia también ha sido el lugar donde más conflictos fronterizos ha habido en el último tiempo y ha aflorado mucho resentimiento entre argentinos y chilenos.

-Pero por qué dices que es el lugar en que más…

-Bueno, estuvo el conflicto en el canal de Beagle que casi lleva a una guerra en el año 78, después la disputa por los hielos continentales en los 90 y ahora apareció una nueva disputa por la plataforma continental… Todo esto ha llevado a mucho resentimiento y cuando lo escucho a usted parece más una excepción que la regla de lo que he escuchado entre los patagónicos.

-Mira, en Tierra del Fuego, en donde compartimos territorio, está Río Grande, nosotros tenemos Porvenir. Y en Porvenir se corre la carrera de la hermandad, que es una de las pocas carreras en América Latina que es binacional

. Es una carrera de autos, no profesional, pero que se corre desde los 70, que incluso se corrió en el 78. Entonces, cuando las élites de determinados lugares territoriales se pelean y vociferan o quizás algún sector minoritario del periodismo vocifera contra los vecinos, la verdad es que eso no representa la mayoría del pueblo. Y lo que yo he visto en la Patagonia es que lo que hay es mucha más hermandad, que competencia, un tráfico permanente, una colaboración constante y por lo tanto creo que eso que tú mencionabas es más bien una excepción. Ahora, siempre entre los países vecinos hay rivalidades, algunas veces sentidas, otras más absurdas, pero lo que yo también he querido demostrar en este viaje es que podremos tener diferencias, por ejemplo en torno a la plataforma continental Antártica, pero si tenemos esa diferencia, tenemos cien otras cosas en común que nos unen y yo voy a trabajar con particular énfasis en aquellas y defenderé mi punto de vista en la que tenemos diferencia.

FUENTE: INFOBAE