Una estadounidense se declaró culpable del homicidio de una profesora de canto de Broadway, de 87 años, a la que empujó al suelo, y que luego falleció tras golpearse contra el pavimento.
Lauren Pazienza, de 28 años, firmó un acuerdo de culpabilidad y será sentenciada a 8 años de prisión, seguidos de 5 de libertad supervisada, informó este miércoles el fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg.
El incidente ocurrió el 10 de marzo de 2022, cerca del parque Chelsea en Manhattan, Nueva York. Pazienza, que según la Policía había bebido mucho y discutió con su prometido, cruzó una calle y se topó con la octogenaria, identificada como Barbara Gustern. Aunque Lauren no la conocía, le gritó obscenidades y luego la empujó intencionalmente al suelo. La caída le provocó una hemorragia masiva en la cabeza. Antes de perder el conocimiento le dijo a la amiga con la que estaba que nunca la habían golpeado tan fuerte en la vida.
Registros judiciales detallan que la acusada se alejó del lugar sin prestarle ayuda a Gustern. Testigos llamaron al servicio de emergencia y la víctima fue trasladada de urgencia a un hospital, donde permaneció inconsciente y con un daño cerebral irreversible. 5 días después le retiraron el soporte vital y murió.
De acuerdo con The New York Times, Gustern era una respetada maestra de canto, que contribuyó en la formación de la estrella de rock Debbie Harry, y colaboraba con algunos elencos musicales de los espectáculos de Broadway. Sus conocidos aseguran que solía actuar en ese famoso circuito teatral junto con su difunto esposo.
La Fiscalía afirma que, luego del incidente, Pazienza tomó el metro y regresó a su residencia en Queens con su futuro esposo. Mantuvo en secreto lo ocurrido por varias horas y procedió a borrar sus redes sociales y un sitio web sobre su boda. Luego huyó del lugar y se refugió en la casa de sus familiares, también en Long Island.
Una denuncia anónima el 19 de marzo, que señalaba a Pazienza como responsable del ataque, llevó a la Policía de Nueva York a la puerta de sus padres. 3 días después se entregó y fue encarcelada. Aunque pronto recuperó su libertad, porque sus padres pagaron una fianza en efectivo de medio millón de dólares, un juez revocóla medida en mayo y ordenó su vuelta a prisión.
De no haber logrado un acuerdo de culpabilidad con la Fiscalía, Lauren habría enfrentado un juicio con cargos que confieren penas de hasta 25 años de cárcel. Pazienza será sentenciada el 29 de septiembre.
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