En una operación cuidadosamente planeada y ejecutada en cuestión de segundos, el emblemático hotel Sheraton Crossroads, que durante más de tres décadas se alzó junto a las autopistas NJ-17 e I-287, fue demolido este sábado por la mañana mediante una implosión controlada. La estructura, reconocida por su fachada de acero y cristal, colapsó poco después de las 7:30 a. m., dejando una nube de polvo y las ovaciones de quienes presenciaron el evento desde puntos autorizados.
El hotel había cerrado sus puertas en diciembre de 2023, luego de haber sido inaugurado en octubre de 1987. Su ubicación estratégica, a pocos metros de la línea estatal entre Nueva York y Nueva Jersey, lo convirtió durante décadas en una referencia visual en el área de Mahwah, así como en un centro habitual para viajeros de negocios y eventos sociales. La propiedad ocupaba un terreno de 140 acres, rodeado de zonas boscosas y montañosas que le conferían un perfil distintivo en el paisaje local.
De acuerdo con ABC 7 y CBS News, el complejo fue reducido a escombros en aproximadamente 15 segundos tras la detonación, que ocurrió sin incidentes. Aunque existía un proyecto para sustituir la antigua estructura por dos almacenes, hasta el momento los desarrolladores no han confirmado oficialmente cuál será el destino del terreno.
Operativo de seguridad impidió el acceso del público al sitio del derrumbe
El municipio de Mahwah anunció con antelación que el área donde se encontraba el hotel permanecería cerrada a todo el público no acreditado. La demolición se llevó a cabo en una propiedad privada y no fue patrocinada por el gobierno local. En consecuencia, las autoridades advirtieron que cualquier intento de acceder al predio sería impedido por las fuerzas de seguridad.
Tal como informó CBS News, el sitio fue vigilado por personal de seguridad y por la policía municipal durante toda la operación. Además de cerrar el acceso directo por la Route 17, las autoridades prohibieron el ingreso desde vías secundarias como Mountainside Avenue, la salida del concesionario Jaguar Land Rover, y otras rutas periféricas, incluyendo el área cercana al río Ramapo. Los agentes que patrullaron la zona tuvieron instrucciones de retirar a cualquier persona no autorizada y de remolcar vehículos estacionados indebidamente.