El Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas advierte que para principios de mayo, la cantidad de contagios por las nuevas variantes del coronavirus podría alcanzar el 90% de todos los casos en la región metropolitana de Tokio.
Por su parte, el Ministerio de Salud del país asiático informó que 271 vecinos de 21 prefecturas japonesas se infectaron con las nuevas cepas para el 9 de marzo. No obstante, para el 13 de abril, ya había 1.141 infectados en 42 provincias japonesas, reseñó Sputnik.
En general, en Japón circulan cuatro cepas del coronavirus: la británica —que está detrás del 94% de todos los contagios con variantes y contiene la mutación N501Y—, la sudafricana, la brasileña y una de origen desconocido. Esta última cepa también preocupa a las autoridades sanitarias japonesas, pues contiene la mutación E484K capaz de disminuir la eficacia de las vacunas existentes. En cuanto a las cepas brasileña y sudafricana, cuentan con ambas mutaciones. Si bien también existen cepas originarias de Filipinas y EEUU, no se propagan por Japón.
Mientras que la N501Y contribuye a una propagación más rápida del virus, la cepa de origen d
esconocido está siendo reemplazada por la variante británica. Un experto del Ministerio de Salud de ese país advierte que “existe el temor de que distintas mutaciones puedan aparecer“. Subraya que es importante “monitorear las cepas a través de las análisis del genoma”.
A su vez, la gobernadora tokiota, Yuriko Koike, podría imponer el estado de emergencia en la capital, ya que al menos 543 vecinos de Tokio se contagiaron con el coronavirus en las últimas 24 horas.
Hasta la fecha, Japón suma más de 530.000 contagios y casi 10.000 víctimas fatales, según datos del Instituto Johns Hopkins.
Fuente: Sputnik